Cuando la imprudencia y la anomia facilitan una tragedia.

Después del accidente que costó la vida a 7 personas y dejo un número similar de heridos, pensé que las portadas y titulares comenzarían a relatar los hechos con la palabra imprudencia, esa es la principal razón por la cual hoy 7 familias estén despidiendo dolorosamente a seres queridos.

La imprudencia es la razón sine qua nom para para que junto a la anomia, estado de desorganización social, generen tragedias como la que hoy nos tienen consternados.

La anomia se refiere a la ausencia de un cuerpo de normas que gobiernen las relaciones entre las diversas funciones sociales que cada vez se tornan más variadas debido a la división del trabajo y la especialización, características de la modernidad.

¿Qué hace falta para que en nuestro gran concepción sus nudos críticos en temas viales encuentren solución? ¿Cómo se priorizan las inversiones? ¿tienen estas una mirada integradora y de desarrollo o solo buscan un beneficio electoral?

La anomia es transgresora, anti desarrollo, transita por un camino que solo busca ralentizar, nos golpea a todos e influye negativamente en los procesos y en esos procesos juegan un papel preponderante los medios de comunicación, ellos pesan demasiado en la mentalidad de la mayoría y su influencia es ambivalente y dificultosa. Por un lado, los medios hacen ver un mundo democrático y relativamente igualitario donde, en teoría, muchos tienen oportunidades de desarrollo y por otra evidencia la precariedad con la cual se crece.

La tragedia de San Pedro de la Paz es el resultado de la imprudencia de un conductor que encontró junto a la anomia de todos los organismos públicos incumbentes el espacio preciso para que los medios llenen portadas con frases grandilocuentes que buscan informar lo que ya se sabe pero que no han sido capaces entre tragedia y tragedia de transformar la realidad.

Quizás por eso la poza de agua entre Lonco y Villuco en Chiguayante sigue ahí, pese a que costo vidas en forma trágica, quizás por eso el cruce ferroviario en Boca Sur seguirá regalándonos horrores, quizás por ello la subida del Pescador en Talcahuano cada cierto tiempo tiene en los medios una portada trágica.

La imprudencia es y seguirá siendo parte la ecuación, pero la anomia por parte de las instituciones públicas y los grandes medios pueden hacer que esa ecuación tenga resultados donde la imprudencia sea menos trágica y traumática.

Cristian Pareja Diaz
Ingeniero en Administración

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *